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¿Y si te dijera que el miedo escénico no es tu enemigo, sino tu primer público? Sí, has leído bien. Porque ese cosquilleo en el estómago, esa voz interior que te dice “vas a hacer el ridículo”, no es más que un ensayo general de lo que está por venir. El problema...

¿Alguna vez has sentido que, por muy bien que prepares un discurso, algo se pierde en la traducción al público? Como si las palabras volaran… pero no aterrizaran. La oratoria tradicional nos enseñó a hablar bien. La neurooratoria, en cambio, nos reta a conectar mejor....

“¿Y esto exactamente… para qué sirve?”La pregunta flotó en la sala de reuniones como una pelota de ping pong sin dueño.Era jueves, reunión de resultados. El responsable de innovación presentaba un nuevo proyecto estratégico.La presentación tenía cifras, tenía lógica,...

¿Te ha pasado que dominas un tema pero, al presentarlo, no logras conectar con tu audiencia? ¿Te quedas en blanco, tus diapositivas no impactan o simplemente no generas atención? Hablar en público es una habilidad entrenable. La buena noticia es que no necesitas años...

Cuando te enfrentas al público, no solo te juegas la exposición de tus ideas, sino también la oportunidad de conectar con cada persona en la sala, creando un impacto duradero que puede abrir puertas inesperadas. Hablar en público es más que una simple habilidad: es una forma de expresarse con autenticidad, de contar historias que resuenen en los demás y de dejar una huella imborrable en la memoria colectiva. Al dominar esta habilidad, no solo te conviertes en el octavo magnífico, sino que también te equipas con herramientas que transforman no solo tu carrera, sino también tu vida. En un mundo donde la comunicación efectiva es la clave del éxito, cada palabra cuenta y cada presentación es una oportunidad para brillar.

La comunicación efectiva en presentaciones no solo depende de lo que dices, sino de cómo lo muestras. Aquí entra en juego el storytelling visual, una herramienta poderosa para captar y mantener la atención de tu audiencia. ¿Por qué es importante? Los seres humanos...

Uno de los aspectos más ignorados pero cruciales de una presentación exitosa es cómo moverse en el escenario. Muchos piensan en "movimiento" como un constante ir y venir, pero es preferible considerarlo como un "cambio de ubicación". Cuando te mueves, cada cambio debe...

“¿Has traído tu presentación?”; “Los ponentes han de enviar sus presentaciones dos semanas antes del evento.”

Vomitar datos lo hace cualquiera. Es la práctica habitual en las presentaciones y reuniones intraempresa. Es un siempre se ha hecho así, o es que Don Jefe quiere ver siempre los detalles. Pero esto tiene un gran “Pero”, aunque desde dentro de la empresa no se puede...

Estás hasta las narices de las reuniones online. Y seguro que intuyes a qué se debe esa fatiga, porque a estas alturas debes llevar decenas -o cientos- de sesiones de todo tipo… ONLINE. Vas saltando de enlace en enlace, con puntualidad germánica (eso que hemos ganado, mira tú por dónde). Ya no sabes cómo ponerte en la silla. A veces hasta te ha faltado tiempo para ir al baño o comer algo (doy fe). Al final del día el cuerpo está entumecido, y tienes la sensación de que te brotan chispitas por los ojos. Manos a la cintura y a estirarte… que mañana, más.